Esta historia ya la conocen quienes me hacen el favor de leer mis notas o quienes pasan por aquí y se detienen... vuelvo a insistir y a compartirla porque realmente esta situación nos está en nuestras manos resolver. Dependemos de un sistema que encuentro caduco y con mínima capacidad de respuesta al menor tropezón.
Hace algunos momentos envié una carta que casi siento sin destinatario, que no puedo evitar pensar que está volando al vacío, sin embargo, no hay peor lucha que la que no se hace. La dirigí a Daniel Karam Toumeh, Director General del IMSS, con copia para la Sra. Margarita Zavala y el Sr. Felipe Calderón.
Sr. Director Daniel Karam Toumeh
Director General del IMSS
Presente
Sr. Director Karam:
Me dirijo a usted con la escaza esperanza de que sea leído y atendido mi mensaje (lamento lo abrupto de mis palabras). Me permito escribirle porque mi familia enfrenta una situación que, está por demás decirlo, es la misma que muchas otras familias mexicanas viven, ¿las razones? desde mi punto de vista no tienen explicación, los "argumentos" los considero inválidos:
- No hay autorizaciones de compra de huesos cadavéricos para implantes de prótesis hasta que se haya dado el cambio de gobierno.
- En consecuencia, es un problema generalizado en todo el país.
- No se permite que quienes tienen la posibilidad compren el hueso o paguen por él pues no se permite en los procedimientos del IMSS.
El ciático fue dañado, provocando en consecuencia, que perdiera capacidad motriz en lugar de ganarla, al menos en otros dos momentos ha requerido que la prótesis sea repuesta por fractura.
La última vez que se hizo el cambio de prótesis porque se zafó, fue a mediados del año pasado y, después de iniciar el proceso de rehabilitación, en octubre-noviembre del 2012, se rompió. Al revisarse su caso se encontró que el procedimiento realizado no era el correcto.
Es así que desde hace un año está esperando a recibir la prótesis correcta con el procedimiento correcto. Hoy por hoy, se tiene la prótesis pero no el hueso para hacer el injerto en la corona de la cadera. En todo momento se le ha indicado que lo único que detiene la cirugía es la falta del hueso.
La pierna está colgando, los tornillos rotos, el femur se ha desplazado y mi hermana ha dejado de moverse incluso en silla de ruedas.
Recurro a usted porque no se a dónde más acercarme, soy orgullosa mexicana, ciudadana activa, convencida de que vale la pena luchar por este México tan lastimado, de que las cosas pueden mejorar, de que las actitudes pasivas y/o corruptas pueden erradicarse.
No se qué más hacer, no sé a quien dirigirme, me han enseñado que entre más alto se está mejor capacidad de respuesta se debe tener, que los sueldos y prestaciones que se devengan obligan a atender y resolver problemas, de ahí parto para, como ciudadana acercarme a solicitar el apoyo de un servidor público para mi hermana o cualquier otra persona que esté viviendo una situación similar. Anexo dentro del cuerpo de este mismo mensaje la última carta escrita con muy poco éxito al Delegado del IMSS en Jalisco.
Atentamente:
Arq. Lucero Miranda Ballesteros
Correo electrónico: lmirandaballesteros@gmail.com
Teléfono celular: 33 1479 8358
Les comparto un reclamo para el IMSS
¿Por qué?
martes, 12 de junio de 2012
Les comparto esta queja que responde a la impotencia y a la rabia de no poder hacer más en este momento, como tantas cosas que ocurren en nuestro país, ¿cuánto más? ¿cuántos más atropellando, haciendo su trabajo al aventón, dilapidando el dinero de los impuestos que son pagados por la ciudadanía. Los servicios del IMSS NO SON GRATIS, mucha gente cree que sí, ¡claro que no! Como trabajadores, pagamos, como dueños de empresas, pagamos, como parte de um¿na organización, pagamos. ¿Por qué entonces aceptar malos tratos, atentados contra la dignidad de las personas, contra la equidad, contra la responsabilidad? Debajo del logo, dice "Seguridad y Solidaridad Social" y bueno, sus siglas, un poema: Instituto Mexicano del Seguro Social. El logo es algo así como una mamá arropando a su hijito y a la vez, la alas de un águila arropan a ambos... seguro alguna vez fue un sueño, una causa, un motivo de orgullo.
Guadalajara, Jal., 12 de junio de 2012
Coordinación Delegacional en el Trabajo
Centro Médico de Occidente
A quien corresponda:
Por este conducto me permito manifestar mi inconformidad respecto a una serie de situaciones que he debido enfrentar y que a continuación expongo:
- El día 29 de septiembre del año pasado fui operada para reponer la prótesis de mi cadera de derecha, misma que se fracturó por uso a principios del mes de junio de 2011 provocando con esto que me vea impedida para caminar y seguir trabajando.
- En enero del año en curso, el material que me fue colocado (en la cirugía de septiembre) se desprendió dando motivo con esto no poder reincorporarme a mi trabajo.
- Debido al desprendimiento del material que, dicho sea de paso no fue el correcto, y de la prótesis, sigo sin poder caminar, permaneciendo en mi silla de ruedas y en la necesidad de que la incapacidad que he recibido a lo largo de este año, no me sea suspendida (ya lo han hecho) ya que no ha dependido de mí que en el Centro Médico se siga esperando autorización y entrega del injerto de hueso para la cirugía de cadera que espero desde hace seis meses, autorización que debe ser dada en la Ciudad de México.
- Es importante señalar que el hueso y prótesis se fracturaron durante los ejercicios de rehabilitación.
- Dada mi situación, al pasado 7 de mayo de 2012 hice entrega de los papeles y radiografías que me fueron solicitadas en Medicina del Trabajo de la Clínica 171 (ubicada en Las Águilas) con el fin de tramitar una prórroga de la incapacidad de la cual soy beneficiaria desde hace aproximadamente un año.
- Después de varias vueltas y de tener que aguantar el maltrato de las personas a cargo, de tener que gastar una y otra vez en taxis y de tener que trasladarme a riesgo de empeorar mi situación no hubo respuesta positiva a mi caso.
- Después de no recibir atención porque “no había médico que supliera”, finalmente me dieron cita para el 28 de mayo, me atendió la Dra. Ruth Gabriela Campos quien a diferencia de los demás me trató con respeto, escuchó mi reclamo y mi necesidad, atendiendo a mi caso, y emitiendo el dictamen correspondiente para que en Medicina del Trabajo fuera atendida mi petición de extensión de incapacidad.
- Por otro lado, a fin de que los derechohabientes seamos atendidos, debemos hacer fila con el fin de que se nos entregue una ficha, para obtenerla una debe llegar a las 5 de la mañana, dado que al día se entregan 25 fichas mismas que son dadas de manera grosera y por ende, poco respetuosa atentando con esto al derecho de trato digno que tenemos todas las personas.
- Otra situación que he debido enfrentar es que para obtener informes, en la puerta izquierdade Medicina del Trabajo de la citada Clínica 171, hay un letrero que incida “no toque, no se dan informes” por lo que si alguien se atreve a asomarse, incluida yo, somos tratados con altanería y prepotencia que, lamentablemente es muy común en las áreas de atención al derechohabiente.
- Finalmente, después de varias vueltas, logré pasar con la Dra. Ruth Gabriela Campos quien a diferencia de otros médicos y empleados del IMSS, y como ya lo señalé, con corrección y de manera eficiente nos atendió, pero ahora el problema es que en mi Expediente cuyo número de afiliación es el 1280630709-1 con el nombre deALEJANDRA MIRANDA BALLESTEROS, se señala que tengo 112 años con 5 meses por lo cual detuvieron los trámites sin mediar más explicación. Yo nací en el año de 1963 como consta en mis papeles y en mi número de afiliación, tengo 49 años, no nací en el año de 1900 y no tengo 112 años.
- Que alguien me de respuesta de cuándo llegará el hueso que se necesita pues con el paso de los meses mis piernas se están atrofiando.
- Que a la brevedad se corrija el error en mi expediente, no tengoporqué estar discutiendo acerca de algo que es fácilmente comprobable.
- Ser tratada con respeto y dignidad como todas las personas merecemos.
ALEJANDRA MIRANDA BALLESTEROS
N° Afiliación: 1280630709-1
