Una película más...

Creo que nunca podré ver películas donde el tema alrededor de quienes cuentan la historia, sea cáncer. Estoy tratando de ver un filme que me han recomendado mucho: "Antes de partir" con Jack Nicholson y Morgan Freeman. He tratado de concentrarme en sus actuaciones, ¡son muy buenas! sin embargo a pesar de una historia que considero bien contada, abordada con dignidad, no puedo evitar sentir como si una nube negra estuviera sobre mi cabeza y entonces, los recuerdos guardados en lo más profundo de mi mente, de mi corazón, regresan entristeciéndome hasta no desear otra cosa que sentarme a llorar por horas y así, a lo mejor, consigo sacar este dolor que no termina de guardarse en la maleta del olvido y que me invade sin lograr detenerlo.

No puedo decir que recuerdo concretamente algo; pienso, por ejemplo, en ese abuelo que partió hace mucho y que vive en la idealización del recuerdo y también en la memoria al ser quien me enseñó a valorar y disfrutar escribir historias, de contarlas, de compartirlas. Al ser alguien que me regaló quizás de los mejores recuerdos que conservo de mi infancia.

Luego, pienso en "Chilolo", él es ahora una presencia borrosa pero que conservo con un cariño entrañable. Mi casa de muñecas, el primer partido de futbol en el Azteca, aprender que lo más importante es la familia. Los partidos de fut en su casa, el mundo de gente llegando a casa de "los León"...mi segunda famlia: cuidados, enseñanzas, ejemplo de vida y lucha.

De alguna manera vuelven circunstancias y momentos que a pesar del tiempo, vuelven a doler cuando se salen del baúl de los recuerdos y es entonces cuando se me hace un nudo en la garganta. Pienso en el padre de Lucero y David, en tantas cosas que ya deberían haber pasado para que sólo quede una memoria lejana; sin embargo, pasa un año y otro y otro más y no logro definir todo esto que regresa.

Nunca había escrito acerca de esto, hoy necesito hacerlo y dejarlo aquí; alguien leerá y quizá en el proceso de compartir, logre liberar parte de este dolor que va y viene cada cierto tiempo y, que sin tener pensamientos concretos, hace que vuelen nubarrones en mi mente y en mi corazón. ¿Cuestión de perdón? Quizá. ¿Cuestión de terminar de cerrar círculos? ... En esta historia sólo queda pendiente uno y es conmigo misma. ¿Cuestión de terminar de entender QUE NO DEBO VER PELÍCULAS CUYO TEMA SEA EL CÁNCER? No cabe duda. Ese es el punto. ___________________________________________
En otra cosa mejor...

Esta semana ha sido enriquecedora, una de las cosas más destacadas es una actividad que comencé a realizar con mis alumnos de SEPMA, está siendo toda una experiencia de aprendizaje, creo que para ellos y para mí. Ya que esté cerrada, queridos seguidores, lectores y extraviados, les contaré en qué terminó. Por lo pronto, les cuento que es un placer trabajar con personas dispuestas a aprender, a abrir sus mentes, a compartir con otros.

Semana de inquietudes pues la incertidumbre del futuro vuelve con fuerza por causa de la Influenza A H1N1. Tranquilidad en el sentido de saber que aunque nos llegue a dar, podremos salir adelante, no dejamos de ser personas privilegiadas que sabemos seremos atendidas y cuidadas. Tristeza porque habrá quienes no tengan esa oportunidad...¿suerte? ¿destino? ¿karma? ¿privilegio? ¿desigualdad? Quizá todo junto. Lo menos que podemos hacer es ser agradecidos de estar donde estamos y ayudar cuidándonos y cuidando a los demás.

¡Ah! ¡Por fin! El Vuelo del Ángel salió al aire, un poco de manera extraña pero está tomando rumbo. Fue extraño, divertido, confuso... Me apoyaron Lidia Orozco, Vale y David... ¡gracias a los tres! Realmente el vuelo fue un poco alocado pues a la hora del programa, ¡también tuve una junta a la que no podía faltar! Entonces los chavos, no me dejaron morir sola, salieron al aire y aguantaron hasta que yo pude llegar, con todo, es revitalizante estar ante el micrófono y saber también que alguien en los controles te está acompañando. A pesar de todo, me gustó este segundo vuelo definitivamente fue intenso.

También ya hemos grabado las entradas y las cortinillas, así como los promos, deben comenzar a salir el lunes o el martes, me ayudó Oscar ¡gracias por apoyarme! Aeros Radio tiene que salir adelante, debe definir su rumbo, su vocación. Ya está ahí, ahora debemos hacer que viva y que viva bien. Ojalá nos sea posible. Ojalá que quienes amamos el trabajo radiofónico y que podemos hacer algo ahí podamos aportar con nuestro granito de arena para sacar adelante esta realidad porque no debemos olvidar que ya no es un proyecto... ¡es un hecho!

Los hijos, espacio para los hijos:

David está metido en una planilla para la Sociedad de Alumnos de Prepa...¡no lo platicó antes! Ya superé la sorpresa y pues ahora confío en que tenga la inteligencia suficiente para administrar sus actividades y su tiempo -hoy se cortó el cabello y se ve guapo el muchachote-. Le deseo lo mejor, será lo que tenga que ser. De lo que estoy segura es de que aprenderá muchas cosas, confío también en que sabrá aprovechar este espacio.

Lucero, sonríe de nuevo, sonríe desde el fondo de su corazón. Esta tarde me ha hecho el favor de cantar y cantar y cantar...no es Sarah Brightman, ni Norah Jones pero si canta es porque su corazón está en calma. Mientras canta, modela en plastilina una Venus Prehistórica que la ha hecho batallar pero lo está logrando. Ahora trabaja en su diario de la clase de Desarrollo Humano. ¡Por supuesto que sigue cantando! Espero que logre ir cada vez mejor, mucho mejor.

Gus se ha reportado rápidamente pues está preparando un examen de "Farma", esta materia lo ha traído de cabeza y lo peor es que creo que la lleva varios semestres. Yo se que aunque le cueste mucho trabajo, él está haciendo lo necesario para salir adelante con ella y no tengo duda de que lo hará. Siempre he admirado su inteligencia y el empeño que pone en la escuela, le queda claro que ese es su trabajo y busca hacerlo bien.

Ceci no ha venido este fin de semana y hace falta en la casa. Poco a poco ha tomado su rumbo en donde estudia y esto la lleva a irse desenvolviendo cada vez mejor y aunque está a tan sólo una hora, cuarenta minutos de aquí, se siente su ausencia. Ojalá y no esté lloviendo mucho y eso le permita darse una vuelta por el centro de Puebla (seguro que ahí no se pierde)...

Martín (este no es hijo, es mi esposo) preparando cosas para mañana, acaba de entrar con cara de circunstancia. Sin embargo, después de eso, su rostro se ilumina con una de sus típicas y agradables sonrisas, de esas que dan serenidad. Ojalá y podamos seguir navegando en esa calma que poco a poco ha ido llegando a nuestras vidas.

Así las cosas, continúa la vida, con proyectos, con sueños, con preocupaciones, con tristezas y alegrías, continúa transcurriendo llena de sorpresas.

Fotografía: el Mediterráneo en toda su infinitud. lmb.